Otro sábado más había quedado con mis queridos Carrozas Climbing para escalar. En esta ocasión invité a Raúl y Sergio para que conocieran al resto del grupo y creí que repetiría alguna vía conocida ya que habíamos quedado en la Pared Negra de Orihuela, pero Domingo que es una fuente inagotable de recursos lo todo tenía todo bien estudiado para evitarlo.
En esta jornada nos juntamos un total de ocho amigos: Domingo, Juanan, Julio, Josemi, Manolo, Raúl, Sergio y yo. La estrategia que pensó Domingo fue hacer cuatro cordadas en dos vías paralelas: la Argos (220 m, V+/6a) que escalaron Domingo, Julio Sergio y Raúl y la Ardilla Arqueológica (205 m, 6a+) en la que nos metimos Juanan, Manolo, Josemi y yo. De este modo casi todos escalábamos vía nueva.
La Ardilla Arqueológica es una vía semiequipada (los pasos duros lo están) de algo más de 200 metros de longitud repartidos en cinco largos y con una dificultad máxima de 6a+. La roca es la típica de esta pared, caliza muy adherente y de gran calidad. Destacan especialmente los largos segundo y quinto, largos técnicos donde una buena técnica de pies es fundamental. Comentaba Domingo que la Argos y la Ardilla Arqueológica son muy parecidas en lo que ha dificultad se refiere, pero a mi me pareció bastante más dura esta última.
Para llegar al pie de vía utilizamos el mismo camino que en la Argos por el barranquete que discurre a la izquierda del pozo y por los cables que superan el pequeño muro de III que nos conducen a la repisa superior. Primero llegamos al pie de vía de la Argos y a su derecha está la Ardilla Arqueológica.
Reseña de la vía
L1 (V, 35 m): Aunque no es habitual en los Carrozas Josemi y yo, que compartíamos cuerda, nos fuimos turnando para abrir los largos. Yo empecé con este primero que comienza ligeramente hacia la derecha por un diedro para luego girar a la izquierda buscando la reunión en una cuevecilla. El largo está equipado con dos parabolts y algún cordino.
L2 (6a, 45 m): Josemi en cabeza. Se sale hacia la izquierda de la reunión cruzando una placa y luego hacia arriba superando unos pasos algo delicados (6a) aunque bien protegidos. 8 parabolts y cordinos.
L3 (IV+, 40 m): Otra vez me pongo en cabeza. Hay que superar un murete sobre la reunión (un parabolt, el único del largo) y luego un techito. Se continúa hacia la derecha por un diedrito hasta la reunión.
L4 (IV, 30 m): Continúo en cabeza por una grada hasta la base del último muro donde está la reunión. El largo está limpio.
L5 (6a+, 55 m): Este largo lo encadena Josemi. La entrada, recto desde la reunión, es más delicada de lo que a priori parece aunque está bien protegida, luego continúa por terreno más sencillo hasta llegar a una placa donde hay que emplearse a fondo (6a+) y sobretodo colocar muy bien los pies en el paso más duro de la vía pero con la tranquilidad de saber que está perfectamente protegido con parabolts. La reunión está en la grada superior a la izquierda.
Bajada
La misma que la Argos, es decir, unos metros hacia la derecha mirando a la pared y siguiendo unos hitos que nos indican el camino (destrepes de II+/III) y que llegan a la línea de rápeles de la Pared Negra.
Después de haber escalado una semana antes los 800 metros de la Línea mágica en el Puig Campana, esta vía me resultó corta y aunque disfruté un montón eche de menos algunos metros más de pared. En realidad son vías que no tienen nada que ver, esta aunque es más corta también es más técnica y la Línea mágica es una vía que se desarrolla en terreno de aventura.
Terminamos igual que unas semanas antes, cuando escalamos la Argos, en un bar de San Carlos tomando unas merecidas cervezas cortesía de Raúl y Sergio los nuevos fichajes de los Carrozas Climbing.
Resumen de la actividad
| Entorno y medio | |
|---|---|
| La Vega Baja | |
| Sierra de Orihuela | |
