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Escalando la ferrata del Ponoig

Vía Ferrata del Ponoig

Vía ferrata en Alicante

La vía ferrata del Ponoig, situada en la Marina Baja de Alicante, es una ferrata vertical, aérea y con pasos atléticos, catalogada con una dificultad de K4. Tiene un equipamiento bastante generoso que se compone de grapas y cable de vida.

Su instalación, por parte de Instalred en el año 2006 a instancias del ayuntamiento de Polop de la Marina y del Club de montaña y escalada León dormido del citado municipio, supuso la práctica desaparición de la vía El Espolón de los ingleses

Cuenta la leyenda (y digo la leyenda porque es una historia que he oído en numerosas ocasiones, pero cuya veracidad no he podido comprobar), que el ayuntamiento le pidió presupuesto a un prestigioso escalador y este pasó un precio desorbitado pensando que sería rechazado. Sin embargo el presupuesto se aprobó y se vió obligado ha llevar a cabo el proyecto.

Resulta paradójico que la vía ferrata haya hecho desaparecer precisamente El Espolón de los ingleses, ya que esta fue la primera vía de escalada del Ponoig, tras cuya apertura en 1970 (por Brian Royle y Kim Meldrum) y posterior publicación de un artículo en la revista Climb con el título «Los Dolomitas de la Costa Blanca», el Ponoig entró en el mapa de la escalada a nivel europeo, y las vías y visitas comenzaron.

La ferrata del Ponoig estuvo cerrada al público, debido al mal estado del cable de acero, desde abril de 2016 hasta julio de 2017 cuando terminaron de restaurarla David Mora y Venancio Costa. 

Tramo final de la ferrata del Ponoig
Luís, Pamela, Pety y yo en el último tramo de la ferrata

Aunque la he escalado muchas veces, e incluso la tengo reseñada en este blog en una entrada de hace años, no la había escalado desde antes de que la cerraran, así que es un medio estreno. 

Lo cierto, es que aparte del cable, que en su día estaba recubierto de plástico y actualmente no lo está, no existe ninguna diferencia. Fue precisamente ese plástico el responsable del deterioro del cable, ya que el agua se condensaba en su interior, oxidando y pudriendo el acero. 

Ferrata del Ponoig

Pety nos convoca a Pamela, Javi, Luis y a mí en una calurosa tarde de verano para escalar la ferrata del Ponoig que por su orientación este se encuentra protegida del sol. Somos un grupo heterogéneo pero las risas y buen rollo nos acompañan desde que salimos de El Campello hasta que volvemos.

Pamela se estrena en este tipo de actividades y para Luis es la segunda ferrata, pero la del Ponoig a pesar de estar catalogada como K4, es más impresionante que difícil. Tiene las grapas bastante juntas y la mayoría de gente que la escala la decota a K3.

Flanqueo en la ferrata del Ponoig
Luís en un pequeño flanqueo

Material

El clásico en este tipo de actividades:

  • Casco
  • Arnés
  • Disipador
  • Baga de anclaje
  • Cuerda para el rapel de bajada (dos de 60 metros o una de 70).
  • Descensor
  • Guantes (opcional). Ninguno de los que fuimos los llevamos.

Acceso

En Benidorm tomamos la CV-70 dirección Polop de la Marina. Pasamos varias rotondas hasta la que indica Benimantell, El Castell de Guadalest, Alcoi, por la que continuamos a la izquierda. En realidad se trata de no abandonar la CV-70 (continuando recto iríamos a La Nucía).

Tres rotondas después de la citada nos desviamos a la izquierda en dirección a las urbanizaciones. Subimos por la calle principal hasta la zona alta. Después de pasar junto al cauce de un barranco llegamos a un parking donde hay un depósito de agua y un helipuerto. Aquí dejamos el coche (el punto exacto es este).

En el parking hay un cartel grande con información detallada sobre la ferrata.

Aproximación

Detrás del cartel sale una senda que cruza un barranco y justo después tira a la izquierda. La senda está marcada con puntos amarillos. Basta seguirlos para llegar al pie de vía.

Sin embargo el ansia nos puede, nos despistamos y seguimos por otro camino señalizado con varios puntos de colores que va un poco más abajo paralelo a la falda de la montaña. El problema no es grave, cuando nos encontramos a la altura del espolón por donde discurre la ferrata nos toca tirar monte a través para llegar al pie de vía. Desde el coche hemos tardado una media hora.

Ferrata del Ponoig

Me pongo en cabeza del grupo para ir haciendo alguna foto desde arriba. 

Luís, Javi, Pamela y Pety escalando los primeros metros
Luís, Javi, Pamela y Pety escalando los primeros metros

El recorrido no es muy variado. Combina muros verticales con algún desplome muy suave, un par de flanqueos y una campa a mitad de vía que permite descansar disfrutando de las vistas al Mediterráneo, las sierras de Bernia y Toix, y el Peñón de Ifach que están enfrente. De hecho la foto que abre el artículo de senderismo en la Sierra de Bernia que publiqué el mes pasado está hecha aquí.

En la campa cambiamos el orden y me quedo cerrando el grupo. Ahora es Javi el encargado de las fotos. Cuando llegamos al final de la ferrata nos da la sensación de que se ha hecho corta, apenas ha sido una hora de escalada.

Bajada

Seguimos un sendero cuya traza, que se dirige al siguiente espolón, se encuentra un poco más arriba a la derecha.

Antes de llegar al primer rápel hay un pequeño destrepe equipado con cable y 3 grapas. Más abajo encontramos una señal de madera y otro cable que nos conduce directamente a las instalación de los rápeles. Hay dos, uno de 25 y otro de 35 metros.

Dado que somos un grupo numeroso hemos traído dos cuerdas una de 60 metros para el primero, y otra de 70 para el segundo. De este modo el primero en bajar monta el segundo rápel, el resto baja los dos seguidos y el descenso es mucho más ágil.

Mientras espero mi turno observo el espolón por donde discurre la ferrata que acabamos de realizar, que se encuentra justo enfrente.

Escalador en la ferrata del Ponoig
Grupo de escaladores en la ferrata del Ponoig. Imagen tomada desde los rápeles en otra ocasión

Tras las maniobras de cuerda nos dirigimos a pie de vía. Desde aquí siguiendo los puntos amarillos (ahora sin errores) volvemos al parking donde festejamos con cerveza, embutido y queso (cortesía de Pety) la actividad que acabamos de hacer.

Probablemente lo más interesante de la ferrata del Ponoig es la sensación de altura y las vistas que regala al Mediterráneo y a las sierras de Bernia, Toix y Peñón de Ifach. Aunque aún mejor es ir en compañía de unos compañeros tan divertidos y simpáticos como los que me han acompañado con los que me he reído un montón.

¡Hasta la próxima!

Galería de fotos

Resumen de la actividad

Nivel de esfuerzo Esfuerzo Medio
Tipo de ruta Ruta Circular
Dificultad vía ferrata Dificultad K4
Entorno y medio
Zona donde se realizó la actividad Marina Baja
Lugar donde se realizó la actividad Monte Ponoig
Tiempo durante la actividad Bruma calor y humedad

Resumen de la actividad

Nivel de esfuerzo Esfuerzo Medio
Tipo de ruta Ruta Circular
Dificultad vía ferrata Dificultad K4
Entorno y medio
Zona donde se realizó la actividad Marina Baja
Lugar donde se realizó la actividad Monte Ponoig
Tiempo durante la actividad Bruma calor y humedad