Una sencilla aunque frustada escalada en Penya Roc (Alicante)

Escalada en Penya Roc, cuatro palabras que intimidan. Y es que Penya Roc es sinónimo de terreno de aventura y compromiso en vías por encima del 6b de autoprotección. Por este motivo siempre pasaba las páginas de las guías donde aparece esta zona de escalada, la veía muy por encima de mis posibilidades. Pero un día Raúl me envió un croquis de una vía llamada Dos Hermanos que parecía asequible e interesante y aunque al principio cayó en el saco de futuribles, el pasado 13 de diciembre fuimos a echarle un tiento.

Se trata de una vía en torno al V grado en terreno de aventura con una longitud 273 metros repartidos en 11 largos con un rapel después del tercero y una tirolina después del octavo. Solo habíamos visto una reseña, pero a priori parecía muy interesante. Las dos grandes torres por donde discurre están justo enfrente de la Aguja del Pilar zona donde encontramos las otras dos vías de esta zona por debajo del 6b, Rise of the Phoenix (V+) y Benito Romerales (6a). El entorno es uno de las más bellos de la Costa Blanca.

Acceso

Desde Benidorm tomamos la carretera de Callosa d´Ensarrià/ La Nucia desviándonos antes de llegar a este último pueblo por la carretera de Castell de Guadalest. Rodeamos el Monte Ponoig primero y las paredes de Penya Roc después y antes del kilómetro 37 encontramos un camino que sale a la izquierda con la indicación Camí de l´Almassera que debemos tomar y continuar durante 2,6 kilómetros hasta una pista que sale a mano derecha y que está cortada con una cadena. Hay espacio suficiente para aparcar tres o cuatro coches.

Aproximación

Cruzamos la cadena y seguimos por la pista hasta que ésta da un pronunciado giro a la izquierda. Abandonamos en este punto la pista para continuar por una senda que sale a la derecha y que llega hasta otra que discurre paralela a las paredes. Debemos continuar por la izquierda hasta llegar a una pedrera a mano derecha por donde seguimos. Enfrente y a la derecha tenemos la Aguja del Pilar y justo al otro lado del valle están las dos grandes torres por donde discurre la vía y a cuya base debemos dirigirnos evitando las zonas de más vegetación.

La escalada

L.1 (V/V+, 25 m): La vía comienza en la base de la pared hacia la izquierda de esta. Ojo porque tiene una entrada alternativa a la derecha con un dificultad de 6a en la que se puede ver un clavo que nos puede confundir. Comencé escalando yo por una canal poco profunda en terreno descompuesto. La salida de la canal tiene un paso delicado (V/V+) que primero va ligeramente a la izquierda para salir luego a la derecha. Antes del paso puse un clavo y allí lo dejamos. Un poco más arriba está la reunión, sin embargo decidí subir un poco más hasta una repisa más cómoda donde existe otra vieja reunión. Desde este punto asegurar el segundo largo resulta más cómodo.

Debo decir que este primer largo no me gusto nada. Entre que yo estaba frío y la pared muy rota tuve malas sensaciones, y si no hubiera visto a Raúl con ganas le habría propuesto darnos la vuelta.

L.2 (V, 18 m): Se puso Raúl en cabeza saliendo hacía la derecha de la reunión por un espoloncillo después del cual hay una buena repisa donde está la reunión. El terreno mejora bastante y este largo lo disfrutamos bastante más.

L.3 (IV, 30 m): Me vuelvo a poner en cabeza por una placa tumbada que da acceso a una repisa donde hay un bonito paso (el que más me gustó de la vía) en roca firme. Después seguimos por una arista con árboles que está muy descompuesta. En este lugar una roca del tamaño de un balón de balonmano cayó encima del dedo anular de mi mano derecha y me dejó bastante tocado. Aunque al principio sangró escandalosamente dejó de hacerlo bastante rápido. Eso sí, casi un mes después aún tengo ligeras molestias.

La arista nos deja en lo alto de esta primera torre y un poco más adelante se ve un gran cancamo desde el que hay que hacer un rapel de unos 25 metros. Esperé a que viniera Raúl he hiciera el rapel primero porque me molestaba bastante la mano. Aunque la vía continúa en la torre que tenemos enfrente decidimos volver, por mi mano y porque lo que habíamos escalado hasta el momento no nos había gustado demasiado. Además la tirolina que hay tras el octavo largo parecía desmontada.

Aunque no es una vía que recomiende, ni siquiera creo que la vuelva a repetir, disfrutamos mucho de la jornada en uno de los lugares más me gustan de Alicante.

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